Asi decia el.
Tenia un humor muy entretenido, del que aprendí gran parte. Cosas, decia.
Estuvo en cama desde febrero, y solo ayer se despegó de la vida a la que tanto se aferraba.
Cosas que pasan.
Hoy fue su despedida, su misa y su entierro. Y la misa que le hicieron no fue tanto como para despedirlo a el, sino como para convertirnos a nosotros.
El infeliz del cura no paraba de hablar de que nosotros debiamos creer en jesucristo para lograr la vida eterna, y mas encima al final el muy tarado se le ocurre decir:
- Vengan el domingo a las 11 de la mañana.
Puro marketing. Me dio mucha rabia.
Fuimos al cementerio y en un hoyo en el pasto dejamos lo que en un momento fue un hombre grande que fue feliz de solo tener siempre comida de mas, para cualquiera con hambre que pudiera visitar su casa.
Si dios existe, y el cielo con el, quisiera vivir ahi, que en una de esas, podemos sentarnos en un sillon, hablar tonteras y no dejar de reir.
Cosas que pasan...
viernes, 6 de junio de 2008
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