miércoles, 18 de junio de 2008

Aventuras obsidicas de una perla afeminada.

Hace exatamente 24 horas atras, estaba sentado en este mismo lugar, escribiendo las mismas porquerias, cuando derrepente aparece siberiano.

Siberiano, aqui en la oficina! Y luego aparecio el pelado hueco. Eso solo significaba una sola cosa sola mente.

- Ibamos a salir a vacunar ovejas.

O ellos iban, y me invitaban a ir, o algo por el estilo. La cosa fundamental, es que cuando llego la hora de partir, me dijeron que fuera con ellos. Y yo, el muy huevon, fui. De echo me habian dicho que me quedara, pero yo huevonamente insistí.

Nos comprimimos en forma compresiva dentro de una camioneta estatal, el chauffeur, aliro el encargado del cuento, el pelado, el siberiano, la vivi y yo. Se encendió el motor y partimos.

Viajamos por los caminos asfaltados hasta que se acabaron, y continuamos en caminos de tierra. Cada vez se distanciaron mas las casas unas de otras, hasta que todo se convirtió en puro campo.

Llegamos a algun lugar, en alguna parte, nos bajamos, nos disfrazamos de mecanicos, y armados de jeringas, tarros, frascos, tijeras, botellas de spray, y una inquebrantable fé, nos lanzamos al vacío.

Que lindas y tiernas son las ovejas.

Mentira! Son unas salvajes. Violentas, agresivas, escurridizas, saltarinas, empujadoras, pesadas y cabezonas malditas chalecos con patas.

Para vacunar una oveja, primero hay que...

- AGARRAR UNA OVEJA.

Y no es cosa facil cuando una oveja pesa 70 kilos, y el vacunador que les escribe, pesa 50. Aunque no es tanta tecnica, tienes que tomar a la oveja, abrazandola por encima. Tomas sus dos manos y con un buen impulso, la levantas hacia arriba para que quede parada en sus dos patas y luego en aquella posicion, retrocedes al mismo tiempo que vas girando sobre tu eje, para dejar a la oveja en proceso de vacunacion, sentada sobre su espalda, con todas sus patas hacia arriba.

Eso, mi queridisimo amigo, es PURA teoria.

Porque partiendo por el primer paso, inicialmente hay que AGARRAR la oveja. Y son corredoras, nada de bobas, bien saben claramente el mejor punto para arrancar, y son grandes saltadoras.

Ahora, si consigues acorralar una oveja, y tienes esa hermosa suerte de vanagloriarte de aquello, vienen los sencillos pasos siguientes que continuan con el proceso de vacunacion. Punto uno, en la teoria, no esta considerado el innegable hecho de que las ovejas se defienden.

Porque no es nada nuevo saber que cualquier animal conciente se resiste a una aguja.

Es en aquel momento, en el de la defensa, en el que se manifiesta la complicacion practica y la teoria no sirve de tanto, sino mas bien, la fuerza bruta.

Conclusion, levantar una oveja en medio del barro, dejarla caer sobre su espalda, y luego afirmarla para pincharla por todos lados, es una cuestion sencillisima... siempre y cuando no te atrevas a hacerlo.

Yo mismo me imaginé un super hombre, y terminé de espaldas sobre un canal de agua lleno de barro, mientras riendo, el agua fangosa negra y espeza, se me colaba por entremedio de los pliegues de la ropa protectiva que ya no me protegía de nada.

Y embarrado hasta el pelo, riendo de mi estupidez, tiritando de frio por la ropa mojada, y mojandome las manos para ir a tomar de nuevo a la maldita lanuda que me hizo pasar tamaña verguenza, me levanto del suelo y me digo a mi mismo...

... vacunar ovejas es pura teoria.

No hay comentarios: