Wenas noches.

Es tarde y estoy cansado. No de sueño, no de esfuerzo. Estoy cansado de tedio. Son las 4 de la mañana y me acabo de convencer que no queda mas que alargarle al dia.

Apagué las luces, el computador, miré al sofa donde duerme la Flo y me enternecí. Lleva varios dias enferma con algo raro. Lo mismo que tiene mi sobrino.

Para que vean el veterinario.

Me enternecí dos veces pero la Flo no puede dormir ahi. Muy enferma estará pero si cometo el error de dejarla, al otro dia el sofa entero, cojines, amohadas y rellenos, aparecerian completamente desparramados inservibles por todo el suelo.

No se que tiene esta tarada con los rellenos que tiene una pasion desmedida por sacarlos todos. Ve tu a saber pero para mi la perra esta loca.

La tomo en brazos, porque la perla no puede bajar la escalera sola, y antes de levantarla voy sintiendo como se va poniendo pesada, inlevantable. Esta grande esta perrita.

Es una protesta silenciosa contra la interrupcion de su comodidad y su sueño. Se pone ridiculamente rigida para dificultarme la tarea de llevarmela a su pieza.

Le preparo un plato de su dieta especial y exclusiva. Ella me mira y se le empiezan a caer sus babas. Porque seran tan babosos estos perros?. Le dejo el plato ahi para que se lo coma y me preparo un plato para mi. No su dieta especial y exclusiva, pero lo suficiente para no amanecer con hambre.

Voy a ver a javier que me llama, corto el agua, veo a la Flo que me rasguña la puerta, desconecto la alarma, abro la puerta, saco a la Flo al patio, saludo a la Kleine mojada que llueve, espero las cacas, no hay cacas, entro a la Flo, cierro la puerta, pongo la alarma, doy el agua, me lavo las manos, corto el agua, me vengo a mi pieza, y empiezo a escribir.

Y escribo y escribo y sigo escribiendo, hasta que el sueño llega, y cuando llega, buenas noches, me voy a dormir...