Mi camara tenia el sensor cochino.
Cochino: sucio, polvoriento, no limpio.
Al menos eso era lo que creia yo, porque cuando sacaba una foto, salian montones de motas negruscas malevolas y endemoniadas.
Habia que averiguar que era lo que tenia.
Asi que para ello, debia enviar mi camara a santiago y pagar un monto relativo alrededor de 60 lucas... unos 120 dolares.
No tengo tu sucio dinero... pero tengo algo mejor... tengo cojones.
Asi que parti a una farmacia y compre lo necesario. Materiales equivalentes a 25o0 pesos... unos 5 dolares. Y cuando llegué a mi casa, puse manos a la obra.
Modalidad: limpieza de sensor.
Se abrió el obturador, se levantó el espejo reflex y sabia que era el momento de actuar. Con nervios de acero, estaba a punto de hacer el equivalente a una cirugia cerebral, aunque un poco mas delicada y con peores consecuencias que manosearle las profundidades internas del craneo a un susodicho paciente incomprendido.
Al menos eso era para mi.
Y ahi, con mis nervios de acero, enajenado en mi faena de limpiar el sensor, pieza primordial, mas delicada y sensible del equipo fotografico digital.
Ya... supongo que hemos terminado... ahora hay que probar... puse el lente de nuevo, se bajo el espejo, se cerró el obturador y luego al terreno.
Foto al cielo, a los perritos, a los arboles, al suelo y luego la confirmacion final...
... descargué las fotos al computador y lo que vi, me dejo asombradisimo...
... profundidad de campo, que bueno tenerte conmigo otra vez.
miércoles, 22 de agosto de 2007
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
1 comentario:
YO EL DIA DEL COPI HAGO ESO CON LA MIA, asi q aprende bien el procedimiento pa q despues me enseñes.con q lo limpiaste? BIALCOL?AGUARDIENTE?AGUARRAS? JA yo sabia q con una perita de aire era suficiente a menos q tenga barro pegado.
ya chau man y enseñame a ponerle nombre al flickr
Publicar un comentario