Pesadillas inactivas.

Anoche me llamo el lucho y me dijo...

- Oye, puedo ir a tu casa mañana en la mañana a buscar la carpa?

Y yo le dije que si.

Anoche me acosté tarde, pero independiente de eso, invariablemente, siempre me cuesta levantarme. Sin importar que hora sea, siempre me levanto con el minuto justo.

Si tengo que hacer algo a las 12, me levanto a las 11.55, aprovechando el ultimo minuto en la cama. Si tengo algo que hacer a las 4 de la tarde, me levanto a las 3.45.

Todo por esa enorme flojera de tener que levantarme, me carga. Yo viviria enchufado en una cama con todo lo necesario para vivir: Una sonda con comida enchufada en mi vena, una pelela, y una tele.

Hoy mi mente estaba bien conciente de que venia el lucho, pero se rehusaba fisicamente a levantarse temprano. Cualquier cosa habia que hacer, para eludir la mañana.

Finalmente llega el lucho, me levanto, lo saludo, buscamos la carpa, se la paso, nos despedimos y vuelvo a la cama. Todo muy bien, no fue tan terrible... en la cama otra vez.

Solo que estaba en lo mejor del sueño, cuando derrepente suena el timbre, y extrañado me levanto con una sensacion fuera de lo comun... voy a ver a la puerta... y...

Era el lucho!!

Mi mente se las habia arreglado para pasarle la carpa en un sueño, recreando cada detalle solo lo necesario para poder volverme a dormir. Que increible es la mente humana que invierte todos sus recursos de creatividad infinita, para eludir levantarse temprano en la mañana.

Un genio brillante que consigue quedarse en la cama... solo que mi mente no habia considerado que el "verdadero" lucho aun no habia venido a buscar la carpa y no habia nada que un sueño pueda hacer para evitarlo.

Ahora claro, el Lucho se ha ido y yo me he quedado con esta sensacion extraña, y como todas las cosas extrañas, quise escribirla aqui, para cuando algun dia reciba un golpe en la cabeza y se me borre toda la memoria, luego lea esto y me de cuenta...

...Que en realidad yo era bastante idiota.