Wuarg.

Tengo un grupo de trabajo en un curso que estoy tomando.

Y una de las niñas es tan quejona que me dan ganas de golpearla. Cuando abre la boca es para decir una queja. Y por ultimo fuera divertida, pero es una voz arrastrada, como recien despertando y en un continuo bostezo.

Tiene cara de perro enfermo y es atadosa para todo.

Quiero golpearla, pero las normas de desencia me lo impiden. Asi que voy a contratar a alguien para que lo haga por mi.

Ahora cuando me habla, trato de evitarla lo mas que puedo, y cuando veo que toma aire para decir alguna tontera, me doy vuelta y me arranco rapidamente.

Porque si me quedo y la escucho quejarse que o porque hace frio o calor, o hambre o sueño, o hay que estudiar mucho o poco, o que el profesor esto, que los compañeros lo otro, que esto, que aqui, que alla...

Mientras vea moverse su quejona y gran boca, yo cierro la mia para acumular mis flemas espesas, juntar un poco de aire, y lanzarle todo violentamente a su cara.

Seria sorprendente que se siguiera quejando despues de tamaña muestra de cariño.

Nose porque escribo esto, supongo que sera el sueño que me desconecta el cerebro y pierdo control sobre mi.

Chuta, en estas condiciones podria escribir cosas muy comprometedoras... voy a tener que evitar escribir a estas horas, mira que luego me delato solo.

Buenas noches, mañana sera otra noche... perdon, otro dia, pero de esos ya se bastante poco.

Buenas noches.