Y debido al inevitable hecho de que ella por lo general es un inconveniente para el desarrollo normal de fiestas, el hecho de que ella hubiera desaparecido por el findesemana, es equivalente mas o menos...
mmmm... a soltar un leon hambriento en un corral lleno de conejos.
Al principio el Leon hara todo lo posible por tratar de meterse la mayor cantidad de conejos en la boca olvidando incluso tragarlos, pero luego se tranquilizara, y se comerá uno que otro conejo cuando le de la gana.
Eso mas o menos pasó por aca.
Se fue mi madddrreee y el leon quedo suelo en un corral lleno de conejos.
Claaaro, yo estaba cansado, no habia dormido nada en toda la semana, que por lo demas habia sido bastante infierno y ahora, tenia la posibilidad de meter un monton de borrachos desconocidos a la casa, y todo eso, libre de culpa.
Era una oportunidad que no iba a desaprovechar.
Asi que para prepararme para "el evento", llegue a mi casa luego del examen, y me acosté en mi camita para dormir lo mas continuado posible y fue de lo mas agradable, te diré. Dormí como un sucio bebe que se ha cagado en sus pañales y lo mejor, no le interesa.
Desperté cuando ya estaba oscuro.
Vengan a la casa los que quieran, y los que no quieran que no vengan que no me interesa. Traigan licores, brebajes, alcoholes y drogas que lo vamos a pasar muy bien.
Tengo una amiga que no conocía. Digo que no conocía, porque nunca la habia visto. Pero de todo lo demas, estaba todo muy claro. Es como la Michelle Pfeiffer en You Have an E-Mail.
Pero ni ella se parece a la Michelle, ni yo me parezco a Tom Hanks.
Pero se entiende lo que digo, cierto?
Ella es la Chio.
Quedamos de acuerdo para presentarnos formalmente aquel dia fatal de conejos acorralados y leones sueltos, aca en mi casa. Ella iba a traer a sus amigas, que son sus amigas, y yo a mis amigos que son mis amigos.
Y luego hacer una mezcla interesante de amigos que se interesan en amigas y amigas que se amigan de amigos... una cosa salvaje.
Esa era la idea.
Pero yo estaba con mis amigos, bastante ebrios ya... varias botellas destapadas, vacias y guardadas, era tarde ya, horas de risas, de conversaciones entretenidas, de vasos vacios, de hielos derretidos, de mugre en el piso, de olor a humo, de cenizas, de luces, de musica buena, constante y seleccionada.
Pero ya eran las 3 y media, y de la Chiito no se sabia nada. Mis amigos se entregaron a la opcion de que no vendría, tomaron sus cosas, y bien borrachitos, se volvieron a sus casas.
Yo por mi parte, me tuve que cerrar a la posibilidad de que la chiito no vendria, y resignado y un poco desanimado, me fui a acostar.
Estaba en la cuarta parte del decimo sueño imperfecto, cuando viene el Luchino y me dice: Oye, tu amiga esta en el telefono, estan perdidas y no saben como llegar.
- Queee??? Vienen para aca??
Y yo pelotudamente me levanto. Pregunto la hora: Las 4:30. Como van a llegar tan requeteretarde!!
Me pongo los pantalones, los zapatos, me tiro agua en la cara y parto.
Efectivamente llegaron despues de miles de vueltas y de completas desorientaciones. Resultaron ser 16 personas que llegaron a la casa en ese momento.
La fiesta se habia armado de nuevo.
Y vamos destapando botellas y acumulando vasos de nuevo.
Y entre los 16, por ahi entremedio habia una cosita chica completamente abrazable, de cara bonita y agradable, que venia sonriente a saludarme.
La Chiito.
Todo escandalosamente bien... fue uno de esos dias buenos, de los que dificilmente puedes encontrar un motivo para olvidar.
Un dia de esos, de los buenos.
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